DIARIO DE UNA APATRIDA: BARCELONA

Un dia de tantos, hablabamos Juba y yo, del apego que uno llega a desarrollar por una ciudad ajena, es muy raro, pero llegamos a la conclusion que aunque en un sitio lo hayamos pasado mal, aunque todo haya sido muy negro al principio, uno no sabe como ni cuando termina por tomarle cariño a algo tan intangible como lo es una ciudad. Yo creo que el hecho de tener la conciencia de saber como ha llegado uno y como el ver lo que se ha logrado con el tiempo, tiene mucho que ver. para mi tiene que ver con el espiritu de un alpinista, esto es, que todo te ha costado tanto, que haz sacrificado y sufrido todo por un objetivo, y de repente caes en la cuenta de que tu objetivo mas o menos lo tienes delante casi o por completo cumplido y es como haber conquistado una cumbre. Para Juba ha sido Barcelona, para mi Alicante, aunque hayan sido sitios donde nos hemos sentido mas solos que en medio de la nada, ha contribuido en parte a ser lo que somos, ha definido en algo nuestro perfil y las circunstancias de nuestros afectos, parte de lo que soy y como soy se ha labrado aqui, al punto de que mucha gente que me conoce desde pequeña me ha dicho un monton de veces lo rara y distinta que me he vuelto, yo no lo he sentido, tal vez ha sido tan paulatinamente que no me paso por los ojos. Lo que mas valoro de todo este proceso es el haber aprendido a apreciar mi tiempo conmigo misma, a no depender de nada ni de nadie y sobretodo a quitarme de la cabeza las necesidades creadas por una idiosincracia anterior que de repente decidi que estaba trasnochada y la sumi en el olvido absoluto. Creo que en algo coincido con Juba y es en el arraigo superficial a un sitio ajeno, es como una madre mala que a fin de cuentas quieres porque no hay de otra, porque tiene que ser asi. El pasado fin de semana por fin y tras un poquito de planeacion nos pusimos en marcha a Barcelona, esa ciudad tantas veces oida de boca de mi amigo, tan alabada, tan engrandecida que ya me moria de ganas por ver. Estuvimos desde el jueves y no paraba de llover, aunque era esa lluvia que no termina por caer como un aguacero pero que sirve justamente para joder los planes, aunque a Juba y a mi no nos importase caminar bajo la lluvia, Fernando se nego ante el aplastante argumento, de que el pelo se le rizaba con la humedad...............................

Fue decidirnos a comprar paraguas el sabado y entonces paro de llover......................

No he visto Barcelona al completo, pues el objetivo primordial de nuestro viaje era ver a la hermana de Juba y su marido que venian de londres para ver y estar un rato con Juba, aun asi creo que el tiempo estuvo bien aprovechado y sobretodo lo pasamos muy bien, aunque habia momentos en que solo escuchaba un zumbido en mi cabeza, porque en el grupo se tenia que hablar ingles porque Tim no entiende ni papa de español, portugues, porque juba y Veronica es obvio que se sienten mas comodos y español porque Fer y yo nos vemos bastante mal intentando hablar portugues y peor con el ingles, asi que fue una caricatura en si misma ver el grupo que formabamos. (alguien tuvo la fantastica idea de poner musica para relajarnos y era Laura Pausini cantando en italiano................).

la sagrada familia

Veronica, Juba, Fernando y yo. tras habernos zampado unas paellas buenisimas.

Juba y yo posando ideales de la muerte para una foto y fernando va y apaga la camara en lugar de disparar, qu

e risa mas tonta!

INSTRUCCIONES: ENCUENTRE ENTRE ESTAS CUATRO IMAGENES ALGUNA QUE NO CORRESPONDA.

Contemplando Barcelona idilicamente

Una vez visto Montjuic, fuimos en una busqueda desesperada de un sitio para comer, en medio de un mar de lamentaciones de Fernando porque ya es mas bien la marca de la casa. decidimos entrar al pueblo español, que es un sitio que me sorprendio muchisimo, porque de oidas yo pense que era como un parque de atracciones en plan semicultural y todo ese concepto es realmente reciente, nuestra sorpresa fue saber que es un sitio que se construyo hace muchisimo con motivo de la exposicion internacional de Barcelona alla por el año 1929, y en si, la idea es un espacio arquitectonico que reproduce fachadas, plazas y alguna iglesia o catedral repartida por la geografia española, claro que aderezado por un buen numero de restaurantes, cafeterias, creperias y barecitos, y lo mas importante por talleres de artesanos, que trabajan in situ con direferente materiales, como el vidrio, esparto, papel, metal etc. realizando trabajos preciosos, como mascaras venecianas, marionetas, caleidoscopios, ceramicas, artesania de vidrio y un sin fin de cosas mas, ahora me arrepiento de no haber echo una foto al taller de mascaras, era una cosa realmente bella.

Elegimos a las carreras el primer restaurante que encontramos mas que nada, porque aqui en España las cocinas se cierran a determinada hora, y por mucho que grites o patalees nadie te frie ni una patata pasadas las 4 de la tarde, asi que entramos y la verdad es que aunque no me habia creado espectativas acerca del sitio, (algun dia les contare de la comida de terra mitica), yo pedi una degustacion de platos catalanes, deliciosos!! y en esas estabamos cuando caimos en la cuenta de que la mesa de al lado era un grupo de brasileños, y que nuestro camarero/mesero, era brasileño, lo mas sorprendente fue que todos eran de la misma provincia que Juba, que cosas tiene el mundo, para mi fue como imaginar irme a China, entrar a un sitio super tipico chino y encontrarme todo gente de Baja California, pues igual. es lo que tiene la globalizacion.

Empieza la despedida de Veronica y Tim.

Fernando, Juba, Tim y Veronica.

Despedida en el prat de Barcelona, date cuenta de lo impredescible que es la vida, la cadena de sucesos que tuvieron que haber pasado para que yo una chica mexicana tomara esta foto de dos hermanos brasileños y un ingles despidiendose en una aeropuerto de Barcelona, todo el tiempo y las mil coincidencias para ese instante. al menos para mi es intrigante.

Despues de despedirnos estuvimos aun por ahi dando vueltas, esa noche subimos al Tibidavo, y cenamos en la cafeteria Paris que era un sitio habitual de Juba cuando vivia en Barcelona, asi que fuimos a probar un grasiento pero delicioso sandwich de mil cosas, y a charlar de mil cosas. esa era nuestra ultima noche en Barcelona, despues Juba nos compro pastelitos de chocolate, todo en la linea "remembering Barcelona".

Nos quedamos en casa de Julia y Mauricio, una peculiar pareja de Francesa y Colombiano, el piso era pequeñito pero muy coqueto, la verdad es que todos coincidimos en que era sencillito pero muy idilico para una pareja.