4/30/2008

NO TE RECUERDO, ESTAS

Porque siempre haz tenido el tono de voz adecuado, para consolarme, para hacerme ver mis faltas, para felicitarme, porque te alegras por lo mio como si fuera tuyo teniendo siempre el tiempo y el espacio necesarios, dos factores que retamos en nuestra amistad de casi una década, tu ahí, yo acá, con un mar por medio, tarifas telefónicas y demás sucesos inesperados.
Porque en mis malos momentos siempre acudo a algún dulce recuerdo junto a ti, a nuestros cafés, a "nuestro confesionario" mirando al pacifico, sin escapatoria, porque cada vez que teníamos que hablar nuestros asuntos, nos reuníamos ahí, frente al mar como único testigo y con el viento y las gaviotas perdiendo nuestras palabras para que fueran solo nuestras, de nadie mas.
Por nuestros lloriqueos infantiles, nuestra alegría, las risas y la complicidad, pero también por toda la angustia que he pasado desde que supe que habías decidido dar el paso mas importante para tu vida, para tu salud, pero sabiendo que podía salir mal, por todas las noches que me he dormido inventando una oración a algún culto inexistente, para rogar que todo te fuera bien. porque eres una pieza central en mi corazón.
Por todo eso, Lalo, mi querido amigo Lalo, quiero decirte que estamos consiguiéndolo.
(..........y porque somos de lo bueno lo mejor, ¡oiga!)

1 comentario:

Diego Koprivitza dijo...

Como que encontré el significado a muchas cosas en tu texto... ¿será que me suena de algo dicha situación?

Me gusta leerte, te mando un saludo desde lo más profundo de la incertidumbre.